Ya es habitual en mi trabajo que cuando llega un nuevo compañero/a me pregunte por los postres que hago y por el blog, porque otros compañeros le han comentado a lo que me dedico en mi tiempo libre, sera para ver si llevo alguno para que prueben, tengo que decir que por ahora no creo que tengan queja.
Una compañera comenzo esta semana y se lo estuve enseñando y hablando de aquellos postres que más me habian gustado y salio en la conversación las panna cottas, un postre que ella no conocia y le comente que es uno de los mas faciles que he hecho y que me encanta su textura, esto me hizo recordar que no hacia una desde Noviembre del año pasado y ya era hora, así que es el postre de esta semana.
Tengo que ponerme las pilas para cumplir con el objetivo que me marque a principios de año.
Para hacerlas necesitareis unos 10 minutos y con las cantidades de ingredientes que os pongo a continuación me ha dado para hacer 11 panna cottas, el numero dependera del tamaño de los moldes pero os deberia dar para hacer al menos 10.
He dejado un poco de lado el blog durante un par de semanas porque he estado pasando una gripe que me ha dejado bastante hecho polvo, tampoco es que estuviese impedido y metido en cama, que bien podria haber hecho algun postre pero lo peor fue que la comida no me sabia a absolutamente nada y la verdad que hacer un postre y no poder disfrutarlo no es que me motivara para ponerme a cocinar.
Fue anoche cuando me volvieron las ganas de meterme en la cocina, de hecho estabamos tranquilamente cenando en casa cuando vi que teniamos media piña en la nevera, me vino la inspiración y lo bueno es que este es un postre para hacer al momento y se prepara en apenas 10 minutos, además gusto mucho.
Ingredientes:
- Una piña natural
- Una cucharada de mantequilla.
- Una cucharadita de azúcar moreno para cada rodaja de piña.
- Una cucharada de ron para cada rodaja de piña.
Elaboración:
Ponemos una plancha o sarten grande a fuego medio-alto y le echamos la cucharada de mantequilla.
Mientras la plancha se va calentando cortamos una rodaja de piña de un centimetro de grosor por persona.
Cuando la mantequilla se haya derretido ponemos las rodajas de piña y las tenemos entre 3 y 4 minutos por cada lado hasta dorarlas.
Espolvoreamos una cucharadita de azúcar moreno sobre cada rodaja de piña las dejamos un minuto y a continuación echamos una cucharada de ron sobre cada rodaja.
Dejamos que se forme el caramelo y retiramos del fuego, ponemos cada rodaja de piña en un plato y la acompañamos de lo que más os apetezca, nata montada como he hecho yo por ejemplo.
Si alguna vez teneis que hacer un postre y no teneis mucho tiempo para poneros a hacer elaboraciones esta es una muy buena opción para salir del paso y aunque es rapida y muy sencilla os sorprendera el resultado.
Disfrutadlo.
Pequeños placeres, grandes momentos.
