Panna cotta de galleta María

 

 

Me declaro amante de este postre, desde la primera vez que hice una panna cotta, allá por 2016, me quede sorprendido por su increíble textura y no me podía creer que algo tan bueno fuese tan fácil y rápido de hacer, si es que tomándomelo con calma en apenas 15 minutos ya las tengo hechas.

Además, es que vale tanto para una ocasión especial como para un día cualquiera que apetezca disfrutar de algo diferente, hoy por ejemplo fue uno de esos días, hace tiempo se me ocurrio la idea de poner galleta Maria como protagonista de este postre y esta mañana bien pronto me he metido en la cocina para hacerlas cuanto antes, para que estuviesen listas para el momento del postre tras la comida, que como he dicho en 15 minutos ya se hacen, luego requieren tiempo en la nevera lógicamente.

Ahora mismo os muestro los ingredientes, con ellos me ha dado para hacer 6 panna cottas, aparte nos va a hacer falta una cazuela, una espatula y unas flaneras si queremos servirlo en un plato al igual que en la foto o unos vasitos, como prefirais.

Vamos a ello.

Ingredientes:

• Medio litro de nata para montar (35% de materia grasa). 
• 250 ml de leche. 
• 85 g de azúcar moreno. 
• 15 galletas María. 
• 6 hojas de gelatina. 

 

Elaboración:

Vamos a empezar poniendo las hojas de gelatina a hidratar en un cuenco con agua fría durante 10 minutos. 

 

 

Mientras tanto, en una cazuela echamos la nata, la leche y el azúcar moreno, calentamos a fuego medio-alto y removemos con una cuchara o espátula hasta que veamos que el azúcar se ha disuelto. 

Dejamos calentar hasta que veamos que empieza a hervir, en ese momento retiramos del fuego, troceamos las galletas y las echamos, cogemos la batidora y vamos a batir hasta que comprobemos que todos los trozos de galleta se han integrado, nos quedara una mezcla cremosa.

 

Escurrimos las hojas de gelatina y las echamos, removemos para que se deshaga y se integre, no hace falta llevar la cazuela al fuego, con el calor que ya tiene es más que suficiente.

Repartimos la mezcla en las flaneras y esperamos a que enfríen, las llevamos a la nevera un mínimo de 5 horas.

 

Cuando vayamos a disfrutarla, para poder desmoldarlas fácilmente, primero pasamos un cuchillo de filo liso (no de sierra) con mucho cuidado por todo el borde, hasta llegar al fondo de la flanera, tendremos listo un cuenco con agua caliente en la que introduciremos el molde unos 5 segundos y le damos la vuelta sobre un plato, movemos la flanera de izquierda a derecha para que salga la panna cotta, si no sale volvemos a pasarla por el agua caliente unos segundos.

Como la veía muy sola la he acompañado de un poco de caramelo, unos fideos de chocolate y un toque de cacao por encima, le queda muy bien, la textura de esta panna cotta es algo más densa que la de una panna cotta tradicional por la galleta que lleva, pero queda muy suave y lo vais a apreciar.

Espero que os animeis a hacer este postre, si tenéis alguna duda ya sabéis que me podeis contactar a través de las diferentes redes sociales, las tenéis en la parte superior derecha del blog. 

Pequeños placeres, grandes momentos.